jueves, 10 de julio de 2014

Como hablar en diferentes situaciones...

En las reuniones Familiares:

"Se burlan de ti"

  • Búscale el humor a la situación y seguro que se lo encontrarás. Te ayu­dará ver algunas películas Italianas donde se dan esos encuentros de fami­lias numerosas.
  • Interpreta un personaje para la oca­sión. Eso es lo que hace cada miembro de la familia, así que piensa con deteni­miento el que te gustaría interpretar a ti. Haz una lista con sus características per­sonales: cómo Irá vestido, su filosofía de la vida, los comentarlos propios de él.
  • Anticipa algunas de esas situaciones que tanto te molestan. Intenta visualizar y situarte en una de ellas: cómo reaccio­narías, qué dirías. Si lo piensas fría mente se te ocurrirán un montón de cosas que no surgen en el momento de tensión. Escríbelas para la próxima vez.

  En el trabajo:

"En la exposición de una idea, te bloqueas"

  • Busca la idea central. Es básica para estructurar bien tu presentación.
  • Prepara cada paso antes de empe­zar a hablar. Empieza saludando y exponiendo la idea principal, desarrolla tu propuesta, presenta las conclusiones y despídete.
  • Reitera la idea principal y enfatiza con el tono de voz las partes clave.
  • Evita la dispersión con la exposición de múltiples ideas. Que se queden con la impresión de que sabes mucho más de lo que expones.
  • Concéntrate en el men­saje que quieres transmitir y olvídate de ti. Cen­tra la atención en comunicar.

  En las reuniones de amigos:

"La pareja habla por mí"

  • Haz un ejercicio de visualización an­tes de esas reuniones: imagínate con cada uno de los integrantes del grupo por separado. Recuerda situaciones en las que hablas con naturalidad y con­fianza con cada uno de ellos.
  • Escucha como si estuvieras a solas. Cuando alguien hable, vuelve a hacer ese mismo ejercicio: escúchale como si estuvieras a solas con él.
  • Escribe tus propuestas. Apunta dónde te gustaría ir la próxima vez y sus ventajas. Tener las ideas claras y la segu­ridad de lo que quieres decir y por qué, te ayuda a animarte a hablar.
  • Recuerda: tienes derecho a dar tu opinión y tus preferencias. Formas parte de un grupo para pasártelo bien, no para dejar de hacer lo que te apetece.

Decálogo del buen orador:

  1. La finalidad de hablar ante la gente es promover la acción. Hablas porque tienes un mensaje que trans­mitir. Evita el discurso vacío.
  2. Los discursos ya están en la ca­beza. Cuando tienes algo que decir, la idea Importante ya está en tu cabeza. Lo único que necesitas es identifi­carla, definirla y desarrollarla.
  3. Explica las cosas con tus propias palabras y desde tu experiencia. Em­plea un lenguaje común que pueda ser comprendido. Y habla desde tu experiencia.
  4. Si piensas que lo harás mal no te equivocarás. Visualiza lo mejor, coló­cate en la mejor actitud.
  5. La mejor improvisación es la que está preparada. Revisar minuciosamente lo que quieres decir te ayudará a tener las ideas claras.
  6. No te creas obligado a decir todo lo que sabes, sino sólo lo que es ne­cesario y oportuno.
  7. Como en las bodas, lleva una idea nueva, una idea vieja y otra prestada. Demasiadas ideas nuevas pueden desbordar y son difíciles de seguir.
  8. Utiliza diferentes canales: imáge­nes, sonidos, emociones.
  9. Fíjate en la expresión de las ca­ras y de los cuerpos. No siempre una cara que te mira fija significa interés; podría haber desconectado hace rato.
  10. No te mientas a ti mismo. Re­pasa honestamente lo que vas a decir.