domingo, 5 de junio de 2016

Es una realidad creciente los Cambios frecuentes de trabajo.

Uno de los aspectos en los que los seleccionadores se fijan a la hora de analizar un CV de un candidato es cuántos años ha permanecido éste en los distintos puestos o empresas, ya que de ahí se pueden inferir determinados comportamientos futuros.

En líneas generales, cuando los reclutadores ven demasiados cambios de trabajo en cortos periodos de tiempo en un CV lo asocian a inestabilidad por parte del candidato y se valora de forma negativa, llevando a eliminar automáticamente estos CVs o candidaturas.

El problema es que actualmente en España, y cada vez más en otros países, este axioma de que cambios continuos de trabajo tras cortos periodos es debido a la inestabilidad del candidato ya no se cumple en multitud de casos, debido en gran parte a la precariedad de los contratos y a la mayor inestabilidad económica.

Así nos encontramos con que los candidatos, en este contexto todavía incierto, buscan más que nunca estabilidad, pero se ven obligados a trabajar en condiciones de cambio permanente. Y además deben convencer a los reclutadores o empresarios que esto es debido por causas ajenas a ellos.



¿Qué pueden hacer los candidatos?

Cada vez más me llegan consultas de candidatos donde me exponen esta situación: su CV muestra continuos cambios o saltos en el tiempo y no saben cómo pueden evitar que esta situación les perjudique a la hora de optar a una candidatura.

En todos los casos siempre les aconsejo que expliquen o añadan en su CV aquella información relevante que explique cuál es el motivo de cese o finalización en una empresa: contratos temporales, por sustitución, cierre de la empresa, etc.

Es decir, se trata de conseguir que el seleccionador no desestime automáticamente una candidatura y consiga, a través de la carta de presentación adjunta al CV o mediante unas líneas de presentación, exponer su situación lo más objetiva posible.

No hay que esperar a "explicar los motivos" en la entrevista personal, éstos deben quedar claros en el CV pues, ante la duda y como he comentado en otros artículos, los seleccionadores eliminarán en la primera criba estos casos.

¿Qué deben hacer los seleccionadores?


Los que nos dedicamos a la selección de personal debemos "cambiar el chip" y dejar de valorar estas situaciones como señal inequívoca de inconstancia o poca fiabilidad: en no pocos casos me he encontrado con excelentes candidatos que por la situación en la que nos encontramos no han tenido más remedio que cambiar continuamente de trabajo o incluso de desplazarse a otros países en busca de nuevas oportunidades, en muchos casos, alejadas de su formación o experiencia.

Fuente: Seyna Gavilá