La vida es como un boomerang,
todo lo que lanzas, tarde o temprano, regresa a ti.
Tus acciones, palabras y actitudes
siempre encuentran el camino de vuelta,
a veces cuando menos lo esperas.
Si das amor, compasión y bondad,
esas mismas cosas llegarán de nuevo a tu vida.
Pero si lanzas negatividad egoismo o maldad, eso también retornará.
Por eso, es fundamental ser consciente de tus acciones
y lo que proyectas,
porque la vida tiene una forma peculiar
de devolverte lo que le has dado a los demás.