El coaching no solamente sirve para
desarrollar el potencial del individuo y que éste alcance sus metas,
supere los obstáculos y dé un nuevo rumbo en su vida sino también para
ganar autoestima, confianza en uno mismo y focalización.
Si bien depende de la casuística y del coach existen aspectos transversales de trabajo en un proceso de coaching para la búsqueda de empleo.
1º El autoconocimiento:
Más allá de los test actitudinales y
vocacionales, es fundamental conocernos bien a nosotros mismos para
poder ofrecer al mercado laboral lo que espera de nosotros. Conocernos
como personas y también como profesionales va a ayudarnos a hablar con
fluidez y confianza sobre nuestras aptitudes y a vendernos mejor en una
entrevista de trabajo.
2º Definir nuestro objetivo profesional
Conocer nuestros valores, saber cuáles
son nuestros talentos y capacidades no solamente es fundamental para
abordar más efectivamente una entrevista de trabajo sino también para
elaborar efectivamente nuestro objetivo profesional – otra habilidad esencial que puede ayudarnos muchísimo para que nuestra búsqueda de empleo sea más efectiva - pues
un objetivo profesional alineado con nuestros talentos, capacidades y
valores no solamente va a convertirnos en trabajadores más productivos y
rentables para la empresa, sino que además, va a aumentar nuestra
eficiencia, compromiso emocional con la misma y por tanto, va a
incrementar nuestra felicidad profesional y también personal.
3º Mantener una actitud positiva y nuestra autoestima profesional
Esto es esencial pues cuando nuestra
autoestima ésta es baja, la percepción de las cualidades personales y
profesionales a la hora de elegir un empleo suele estar por debajo de
nuestras posibilidades. Y no solamente eso sino que además es algo que
por mucho que intente evitarse se acaba transmitiendo al entrevistador.
4º La atribución que hacemos de nuestro éxitos
La atribución que hacemos de nuestro éxitos también
es algo a tener en cuenta, pues si uno achaca sus éxitos y fracasos
exclusivamente a causas externas no se siente responsable y por tanto,
no mejora su situación. Por el contrario, si uno admite y asume su
responsabilidad se dan las condiciones para cambiar la situación y
mejorarla.
Finalmente, es importante que cuando elijamos a un Coach tengamos en cuenta los siguientes aspectos:
- La metodología que el “coach” va a aplicar a lo largo del proceso.
- Background y trayectoria profesional del coach.
- Formación del coach.
- El grado de conexión que se establece con el coach “feeling o química”
- Y su compromiso ético / confidencialidad.
El definitiva, el coaching es una
potente herramienta que puede ayudarnos mucho durante un proceso de
búsqueda de empleo. El quid de la cuestión está en escoger bien a
nuestro coach, definir bien aquello que queremos trabajar e implicarnos
al 100% en el proceso.
Fuente: Núria Tomàs (Turijobs)